Ágora
El proyecto renueva la identidad del espacio central, enfocando la Fuente como polo atractor de la actividad, recordando que este fue el elemento que durante tanto tiempo atraía encuentros y relaciones proveyendo de vida a los vecinos. A partir de esta idea se organizan y distribuyen los elementos transformadores del espacio, ordenando y protegiendo las circulaciones peatonales: jardines, sombras, gradas, bancos, rampas e iluminación urbana.
La plaza se genera en torno a la fuente, que se comporta como núcleo de la misma. A su alrededor se dilata la superficie de plaza abierta, libre de tránsito rodado que, mediante bandas equidistantes a la plaza ovalada, se distancia del perímetro anexo a los edificios. La plaza se comporta como un ágora de disfrute, reuniones, espectáculos, ferias y festejos locales.
La plaza ovalada nace de la necesidad de generar espacios dilatados en el perímetro y un núcleo diáfano para la comodidad de los usuarios. Mediante tangencias, simetrías y trazos curvos se consigue insertar este espacio nuclear y de respeto hacia la avenida Hernández Serrano, el Ayuntamiento y los edificios aledaños.